¡Que corta es la juventud, pero que larga es su agonía!. Y no me dejarán mentir los jovenes y adolescentes que leen estas líneas. Hemos perdido el horizonte, nos alejamos del camino. problemas, dificultades, temores, nos encierra muchas veces en círculos viciosos de los cuales es difícil salir.
¡Qué podemos hacer frente a esto! ¿A quién recurrir?
Esta es una nueva aventura para mí. Siempre he considerado a Dios como parte fundamental de mi vida y mi existencia. Pero jovenes, cómo podemos hacer palpable y real a Dios en nuestras vidas. Todos nos Dicen que el es la solución; pero ¿hasta qué punto lo es?
Quiero descubrir en este tiempo un nuevo estilo de vida, una nueva forma de conceptuar mis ideales, un nuevo esquema de pensamiento... ¡Por qué se que la vida no solo es lo que mis ojos pueden ver, hay algo más!
Empecemos por esta corta presentación, no esta demás decir, que tambien soy un joven como muchos que quizá van a leer estas líneas; uno como tantos dispuestos a ya no ser el mismo, a cambiar radicalmente su generación. Pero el cambio empieza por uno mismo... ADELANTE!!!
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